EL FRACASO

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EL FRACASO

 

        Muchas son las cosas que se dicen sobre el fracaso: forma parte de la vida, si no fracasas no aprendes, es el preludio del éxito…y un sinfín más de frases hechas para rellenar libros de autoayuda.

        En el deporte resulta muy habitual fracasar. Lo hace quien estaba llamado a salir campeón y cae derrotado en una final, un equipo que pierde la categoría o todo aquel que no cumple con las expectativas marcadas. Porque, al fin y al cabo, estas son las grandes aliadas del fracaso. Uno sale a competir con la ilusión, el propósito o la obligación de conseguir un resultado determinado y no conseguirlo resulta devastador.

        Eso es en lo que se ha convertido el deporte profesional, hasta la vida misma, en la historia de los triunfadores frente a los fracasados. Alguien, ya sea la prensa, la afición, los directivos o los mismos deportistas, decide antes de empezar una competición que el único resultado válido es este o aquel y que cualquier cosa que no sea la marcada antes de empezar a pugnar supondrá un descalabro.

        Para mí el fracaso es otra cosa bien diferente y no suele tener como nota calificadora aquella que se produce al final, si no la que durante el proceso nos conduce al desenlace. Fracasar es no haber puesto todo el deseo en el desempeño de la tarea, no ser honesto con el esfuerzo, leal con los compañeros y fiel a los principios. El fracaso con mucha frecuencia suele ser el resultado final de la deslealtad a lo citado anteriormente.

        Cuando la gente busca trabajo en Estados Unidos, haber fracasado es un aspecto altamente considerado, ya que supone haber emprendido, haberse arriesgado y, seguramente, haber aprendido. En otros países, entre los que se incluye el nuestro, fracasar es la mayor de las desgracias.

        Sabina decía en su canción Conductores suicidas: “a los dos nos gusta el verbo fracasar”. No, no es así, ni de lejos; porque siempre hemos sido nobles y honestos en el esfuerzo, y aunque eso no siempre sea una garantía de éxito, lo es de tranquilidad con uno mismo. Y eso no tiene precio.  

EL FRACASO

EL FRACASO           Muchas son las cosas que se dicen sobre el fracaso: forma parte de la vida, si no fracasas